El bestiario de las catedrales me saltó desde las estanterías de la biblioteca, así, tal cual. Me llamó mucho la atención la portada y encima ese día iba buscando el Tratado de Iconografía de Juan Esteban Lorente (del que ya te hablaré otro día). Por ello, lo añadí a mi pila de libros sin pensarlo y me lo llevé. Me gustan mucho las catedrales, como a la mayoría de los enamorados del arte, y el medievo es un periodo que siempre me atrapa. Sin embargo, el título del libro es un clickbait en toda regla. Sí, aparecen catedrales y, lógicamente, es un bestiario, pero la obra es más lo que reza el subtítulo: «Animales y seres fantásticos del mundo antiguo al medievo cristiano». Más que catedrales vas a encontrar una lista de animales analizados en su simbología y un listado de recovecos de iglesias pérdidas por España en las que los puedes ver (lo que me ha llamado mucho la atención todo el libro). Yo me había esperado más, antes de leerlo, análisis de conjuntos iconográficos en catedrales. Aun así, lo he disfrutado y me siguió pareciendo interesante.

Se trata de un libro claro y extremadamente estructurado (todo es A, B, C; punto a favor si quieres investigar sobre el tema, pero un tanto tedioso si es lectura de placer). Es un recorrido por una abundante fauna, real y fantástica, desde la Antigüedad hasta su plasmación en las «Biblias pétreas». Cada animal está tratado desde los escritos clásicos y se aborda la transformación de sus concepciones para darle sentido en la moral cristiana (de hecho, casi la mirada de la Antigüedad pesa más en algunos epígrafes que las cuestiones medievales). Los más interesantes, sin duda o, al menos, en mi caso, han sido los fantásticos, pues descubrir su procedencia y conocer sobre ellos más allá de sus tópicos siempre es un punto a favor. Además, están agrupados de manera muy bien hilada y los títulos siempre me despertaban alguna sonrisilla. Los reales son también atractivos, especialmente aquellos que una persona del Occidente medieval no podía haber conocido. Es una forma de mirar la fauna muy distinta a la que tenemos hoy.

Personalmente, me hubiera gustado un poco más de interpretación. El autor, simplemente, te expone cuatro/cinco fuentes (alguna más hay, pero esas son la base claramente y se mencionan en casi todos los animales) de forma ordenada e intentando que puedas contrastar ciertos aspectos comunes o dispares. Pero no hay análisis, ni postulados, ni interpretación la mayoría de las veces. Aunque sí que toda la información que aporta y la manera en la que se distribuye, te puede llevar a crear tus propias hipótesis. Asimismo, el texto se apoya en imágenes en muchas de sus páginas lo que esclarece enormemente las descripciones que se hacen. Sin embargo, dado que se describen tantas obras de forma mecánica y no puede haber tantas imágenes, enocasiones o bien solo pasas los ojos rápido sobre ellas o bien los buscas tú misma si tienes Internet a mano (lo que ayuda muchísimo a comprender todo lo que se presenta).

Posiblemente el carácter tan mecánico, plano y puramente expositivo fue lo que hizo que en ocasiones me diera algo de pereza cogerlo, aunque luego cuando estaba leyendo no quería parar de hacerlo porque el tema es atrayente y plantea muchas curiosidades (y a mí personalmente me pirran las curiosidades, los orígenes y las evoluciones y eso sí es muy posible verlo en todo el libro). El bestiario de las catedrales me ha hecho mirar de otra manera la aparición de animales en el arte. Ya sabía que podía haber mucho detrás de cada elemento en una obra, pero esto me ha recordado que las intenciones de quién ejecuta la obra o la encarga pueden cambiar el significado de los elementos representados y que no hay nada «desideologizado» en el arte. De todo aspecto artístico puede sacarse una lectura. Además, me ha dado algunas claves que a la hora de hacer comentarios de arte, ver obras o comentarlas con alumnos y otras personas pueden ser detalles llamativos que sacar a colación. La coda final con imágenes y resumen de las claves de cada animal una maravilla también como guía de referencia que tener a mano. 

¿Recomendable? Si te interesa la iconografía al punto de querer concretar, si el tema te llama mucho la atención, si te gustan las curiosidades o si puede servirte para lo que andas estudiando/investigando, es una buena obra de referencia/introducción en lo específico de su tema (aunque me gustaría ver alguna obra más que mencione fauna en la iconografía para comparar). Es de esos libros buenos de leer si te resultan atrayentes de primeras o los necesitas por algo, pero no sé si como lectura de placer o de casualidad puede tener efecto. A mí me ha gustado toparme con ella y un puntazo a favor ha sido descubrir todas las variantes y posibles escenas en las que aparecen los animales, hay tanto mundo más allá de lo típico que hasta me quedaba con ganas de más en algunos seres.

¿Qué libros de iconografía recomiendas?